Por Oliver Oller
…Life moves pretty fast. If you don’t stop and look around once in a while, you could miss it…  (Ferris Bueller)
A principios de la década de los ochenta se podía observar cómo iba cambiando poco a poco el estilo de hacer comedias y de contar historias divertidas; dejando atrás el poco sentido del humor que tuvieron los setenta con grandes obras cargadas de dramatismo y fuerza bélica. Este estilo peculiar de contar historias empezó pronto a convertirse en sinónimo de un nombre, John Hughes, a quien le hacemos reverencia  en este artículo por ser el escritor/director más completo e influyente dentro del género durante toda la década de los ochenta y gran parte de los noventa.
John Wilden Hughes Jr. nació en los suburbios de Lansing, Michigan en 1950, de donde luego migraría en su adolescencia hasta Chicago, Illinois. Atendió la secundaria en Glenbrook North High School, la cual fue parte importante de su fuente de inspiración para la creación de la mayoría de sus personajes de estudiantes y adolescentes. Paralelo a sus varios trabajos y posiciones en empresas publicitarias, empieza a escribir historias cortas hasta lograr poder introducir sus escritos en la revista cómica de National Lampoon. Una de estas historias (Vacation’58) que contaba las anécdotas de un viaje que tuvo con su familia en ese año, fue luego la base del guion de la exitosa película, National Lampoon’s Vacation (1983) con Chevy Chase.

Luego de haber escrito varios guiones de películas como Class Reunion (1982), Mr. Mom (1983) y Vacation (1983), toma de estas experiencias para iniciar detrás de las cámaras con su primer largometraje, Sixteen Candles (1984) que contaba de las vivencias de una joven adolescente en secundaria y de cómo sus padres olvidan su esperado cumpleaños 16, por estar preparando la boda de su hermana; repleta de escenas memorables y cómicas de la década, sirviendo como trampolín de varios actores jóvenes en ascenso de aquel entonces como Molly Ringwald , John Cusack y Anthony Michael Hall; el film fue todo un éxito y le abrió grandes puertas a Hughes para seguir acentuando su estilo.
Sin detener su gran imaginación, vuelve al año siguiente con su primer film como productor, el cual también escribió y dirigió, The Breakfast Club (1985), ingenioso guion de un grupo de cinco estudiantes que deben pasar un sábado completo castigados en la biblioteca de su secundaria, y de cómo experimentan la oportunidad de compenetrarse y descubrir que a pesar de sus tan distintas personalidades, pueden encontrar fuertes vínculos que los convierten en similares. Este film dio inicio al famoso grupo de jóvenes actores denominado “Brat Pack”, que incluía a sospechosos habituales como  Molly Ringwald, Ally Sheedy, Anthony Michael Hall, Emilio Estevez y Judd Nelson, quienes en los ochenta participaron en más de una decena de películas junto a otros miembros del mencionado grupo. El éxito de Breakfast Club fue enorme y rápidamente se fue calando entre las más vistas y preferidas dentro de las comedias de esos años, hasta el día de hoy es considerada dentro del listado de las primeras tres high school movies of all time por la revista Entertaiment Weekly.
Siguiendo su inagotable trabajo de ese mismo año, ahora como guionista solamente, se estrena European Vacation (1985), secuela de Vacation (1983) ahora tomando lugar en europa, también conformada por el dúo de Chevy Chase y Beverly D’Angelo; dirigida por su amiga Amy Heckerling, quien ya se había casado con la fama en otro film icónico de los ochenta Fast Times at Ridgemont High (1982)
Para terminar el 1985 estrena Weird Science, escrita y dirigida por él, uniendo fuerzas por tercera y última  vez con Anthony Michael Hall; entretenida comedia de fantasía en la que dos mejores amigos crean la “mujer perfecta” por medio de un programa de computadora combinando los mismos recursos rudimentarios del personaje del Dr. Frankenstein; también exitosa en la taquilla, presentando a la hermosa modelo Kelly LeBrock y la participación secundaria de un novel actor en ese entonces, Robert Downey Jr. Empieza en el 1986 con el guion de Pretty in Pink, dirigida por Howard Deutch,   protagonizada por Molly Ringwald, Andrew MacCarthy, James Spader y Jon Cryer en su papel insignia del fastidioso y enamorado “Duckie”; esta drama/comedia juvenil contaba del contraste entre una linda pero ordinaria estudiante de secundaria con un apuesto y rico joven (MacCarthy) y las dificultades de tratar de encajar dentro de un circulo de nuevos “amigos” hipócritas y consentidos.
Ese mismo año vuelve a tomar el control como director/productor/guionista de uno de sus más emblemáticos trabajos, Ferris Bueller’s Day Off, envolvente y entretenida comedia que reúne todos los toques de autor que caracterizaban la grandeza de Hughes de presentar historias que involucraran estudiantes en revuelo, el protagonismo de sus escuelas y las cualidades de cada uno de sus personajes. El film se centra en el transcurso de un solo día de clases en el cual el personaje principal Ferris Bueller (Matthew Broderick) decide pasar fuera de clases y fuera de la escuela con la excusa de tener un virus casi terminal; la participación de un estupendo elenco que incluía a Jennifer Grey, Jeffrey Jones, Alan Ruck y una breve participación del joven Charlie Sheen. El film cuenta con varias de las tomas más recordadas de los ochenta y frases tan famosas como…Bueller?… Bueller?
Empieza el 1987 con el guion y producción de la comedia romántica Some Kind of Wonderful, dirigida también por Howard Deutch, tocando nuevamente el tema social de las dificultades de los jóvenes en secundaria para poder mezclarse y sobrepasar las barreras de aceptación entre amigos. Aquí vemos a un joven Erick Stoltz acompañado de Lea Thompson, Mary Stuart Masterson, Elias Koteas y Craig Scheffer. El film cuenta con una de las escenas de beso más sobresalientes de la década. Le sigue a esta Planes, Trains & Automobiles con Steve Martin y John Candy, dirigida/escrita /producida , esta sería la primera comedia de Hughes en la cual no participaran jóvenes estudiantes ni las escuelas fueran escenario principal; cuenta de tomas jocosas y muy acertadas, la historia entre ambos personajes nos recuerda un poco a The Odd Couple con Lemmon y Matthau, la interpretación del vendedor ambulante por John Candy  fue quizás sin temor a equivocarme la mejor actuación de su carrera y como de costumbre dentro de las historias de Hughes termina con un buen happy ending.
Continúa en 1988 con la producción, guion y dirección de una de sus menos exitosas puestas en escena, She’s Having a Baby, que aunque contaba con la presencia de un ascendiente y cotizado Kevin Bacon, no pudo llegar a un público que estaba ya acostumbrado a un patrón de sus otras mejores producciones, pero eso parte del proceso de ascenso y descenso de cualquier artista.  Algo similar sucedió con sus dos siguientes, The Great Outdoors (1988) con John Candy junto a Dan Ayckroyd, y Uncle Buck (1989) con John Candy otra vez, en donde podemos observar a un pequeñín Macaulay Culkin.
El guion y producción de Christmas Vacation (1989) junto a Chevy Chase, convirtió esta película en una de las ya predilectas para la temporada navideña; en ella todos los miembros de la familia Griswold deben tratar de pasar en armonía sus tradicionales fiestas hasta que las cosas empiezan a tomar el rumbo del desastre.
Hughes continúa con el mismo espíritu navideño, escribiendo y produciendo su siguiente trabajo Home Alone (1990), la cual sería su primera obra infantil y le consagraría su toque de Midas al convertirse en una de las películas más taquilleras de todos los tiempos al día de hoy. La historia de un jovencito que fue olvidado en casa por su familia en un viaje a Europa y de cómo tiene que ingeniarse escapar de unos ladrones de temporada. Utilizó para el papel protagónico a Macaulay Culkin quien con solo 10 años en ese entonces se luce ante las cámaras dejando un personaje amado por todos.
Luego de escribir y producir Career Opportunities y Dutch en 1991, dirige la que sería su última participación detrás de las cámaras, Curley Sue (1991), agradable comedia con John Belushhi y Kelly Lynch que no tuvo tanta suerte en las salas, y muestra la historia de un padre viudo e indigente que utiliza a su hija para engañar a personas de su dinero, hasta que encuentra la mujer que lo retiraría de su degradable “profesión”.
Algo curioso de Hughes es que en la década de los noventa empieza a veces a escribir guiones utilizando el pseudónimo de Edmond Dantes, en referencia al personaje del libro El Conde de Montecristo escrito por Alejandro Dumas.  Sus obras siguientes Home Alone 2 (1992) y el adorado perro Beethoven (1992) también alcanzaron grandes éxitos en la taquilla. Participó como escritor y guionista en Dennis the Menace (1993), Baby’s Day Out (1994), 101 Dalmatians (1996) y Flubber (1997) junto a Robin Williams, todas con muy buenos resultados taquilleros.
La extensa filmografía de John Hughes no nos deja de impresionar, ¿cómo un individuo podía constantemente deleitarnos con tan buenas historias? Para finales de los noventa y la siguiente década, Hughes se mantuvo retirado de la vista pública, se reusaba a dar entrevistas y  de manera recluida solo participaba en eventos de bajo perfil y poca publicidad, aunque siempre trabajando como el incansable artista que era. En agosto del 2009 un ataque al corazón terminó con la vida física de este gran genio.
Fue sin duda la década de los ochenta su punto de referencia y carta de presentación de aquel estilo único de la adolescencia eterna. En ocasiones me he preguntado, ¿Qué hubiesen sido los ochenta sin John Hughes? ya que esta es la década en la cual conocí la magia del cine y la búsqueda a esta respuesta siempre me ha llevado a un solo enunciado: Gracias John!!!
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Oliver Oller