Todo director posee un sello distintivo algo que podemos referir como una especie de firma. Esa huella que pueden dejar dentro de un filme que los hace particulares, puede ser una toma en específico, un personaje, un tema recurrente y hasta la forma de contar su historia. En el caso de Wes Anderson esta marca registrada se distingue a leguas, el hombre posee un universo único y en cada una de sus películas este universo brota frente a nuestros ojos. En The Grand Budapest Hotel todos esos elementos que conforman parte del universo de Anderson entran en juego para conformar lo que consideramos su mejor película hasta el momento.
Los detalles visuales y el cuidado de la puesta en escena no es sorpresa. El uso preciso de los colores y el manejo de los elementos que componen cada secuencia es algo en lo que el director nunca ha fallado. También están sus personajes singulares encabezados en esta por Gustave H. (Ralph Fiennes) el eficiente concierge de «The Grand Budapest Hotel». Y ahora dirán que ya lo ha hecho antes, que en «Moonrise Kingdom» logró lo mismo o que en «The Royal Tenenbaums» también. Pero aquí todo cobra otra dimensión, la máquina está bien aceitada y una vez inicia su marcha lo que nos espera es una verdadera montaña rusa donde la aventura, la comedia y el drama se mezclan para llevarnos en un viaje por el mundo de Anderson.
Ralph Fiennes está simplemente espectacular como Gustave H. y a su lado el inolvidable Zero (Tony Revolori). Ambos
son dos de los mejores persoanjes que Wes Anderson haya podido concebir, complejos emocionalmente y con un carisma desbordante. Fiennes y Revolori son los que marcan el paso y tras ellos desfilan nombres como Edward Norton, Willem Dafoe, Saoirse Ronan, Jude Law, Harvey Keitel, Adrien Brody y el que nunca falta en las películas de Anderson, Bill Murray. Y podemos seguir arrojando nombres pues esta es otra marca registrada del viejo Wes, sus filmes se componen de múltiples personajes en muchas ocasiones muy breves pero de implicaciones inmensas. «The Grand Budapest Hotel» no es la excepción y aquí los secundarios son brillantes y determinantes dentro de la historia.
Inspirándose en los escritos de Stefan Zweig, Wes Anderson construye el guión y nos lleva a la imaginaria República de Zubrowka. No importa si Anderson hubiera decidido llevarnos a Martes o Venus, lo que importa es la forma en que lo hace. Transformando lo convencional en excepcional y convirtiendo personajes ordinarios en figuras extraordinarias. Primero atrapa cada uno de nuestros sentidos con su formidable puesta en escena. Los colores dominan y se apoderan de nuestros sentidos y la música de Alexandre Desplat (The Tree of Life, Argo) se encarga del resto.
10/10
Ficha Técnica:
- Dirección: Wes Anderson.
- Guión: Wes Anderson, Stefan Zweig.
- Reparto: Ralph Fiennes, Tony Revolori, Saoirse Ronan.
- Género: Comedia, Drama.
- Duración: 100 min.
- País: Reino Unido.
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HPS
