Mientras veía Only God Forgives, del director Danés Nicolas Winding Refn, mi mente se encargaba de arrastrarme hacía otro director. Todo el aire del filme me evocaba un sabor conocido o al menos removía emociones similares a la que despiertan las películas de un señor llamado Alejandro Jodorowsky. Grande fue mi sorpresa cuando al final de la película veo que tiene una dedicatoria al ya mencionado director Chileno, luego vendría la información de que Refn se ha vuelto una especie de discípulo intelectual de Jodorowsky. Aun cuando la marca de Refn está muy bien definida, se puede percibir influencias del cine de Jodorowsky en esta Only God Forgives.
Al igual que la obra de Jodorowsky el cine de Winding Refn está revestido de un aura especial. Sus películas de una manera contundente trazan una línea que hace que el espectador o las ame o las odie, el punto medio es algo que simplemente no existe cuando nos referimos al Escandinavo. Ahora después de sonar hasta en el último rincón del mundo con su DRIVE, Refn iba a estar más expuesto que nunca, este hecho quedó probado con la presentación en Cannes de Only God Forgives. Las reacciones fueron desde un completo abucheo hasta ovaciones de pies. La crudeza de las imágenes y el tratamiento de la historia hicieron que las opiniones quedaran más divididas que Israel y Palestina.
Para nosotros Only God Forgives es una muestra más del increíble talento de este joven director, una vez más la maravillosa estética visual que caracteriza todas sus películas, sirve para desarrollar una historia de una profundidad intelectual y espiritual impresionante. La redención es el motivo y la causa, ella es la causa de la acción y a su vez las reacciones se derivan de ella misma. Ryan Gosling es la clave, su personaje de Julian encierra el significado de esta historia; su búsqueda lo mueve por un camino de expiación que se ve obstaculizado por las propias cargas que arrastra de su pasado. La nociva y misteriosa relación con su madre, interpretada por Kristin Scott Thomas, es un elemento más que agrega densidad y complejidad al personaje de Gosling.
Pero es el personaje de Vithaya Pansringarm donde el filme alcanza su punto más prominente, su luz arropa a todos y nos deslumbra. Los contrastes que genera el personaje son alucinantes y su propósito como el ente que imparte justicia con aire de divinidad encaja a la perfección con el mundo que lo rodea. Ese Chang es como un ecualizador, es la balanza que decide cual es el castigo para cada pecado. El está por encima de todos y es juez y verdugo.
De alguna forma los filmes de Winding Refn poseen un peculiar orden dentro del caos en que se desenvuelven y este no es la excepción. La incapacidad física del director de apreciar ciertos tonos de colores, se ha convertido en un beneficio para los que disfrutamos su cine. Refn se ve obligado a utilizar colores con fuertes niveles de contrastes para poder apreciarlos de manera correcta y esto se traduce en planos sublimes con tonalidades únicas, el juego de luces y colores se convierte en una fiesta visual.
Only God Forgives viene a reafirmar que el cine de este director Nórdico es un cine de culto. En su mundo Refn es amo y señor.
Calificación: 8/10
Ficha Técnica:

• Dirección: Nicolas Winding Refn.
• Guión: Nicolas Winding Refn.
• Reparto: Ryan Gosling, Kristin Scott Thomas, Vithaya Pansringarm.
• Género: Drama.
• Duración: 90 min.
• País: Dinamarca/Francia/Tailandia.

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HPS