Extremadamente cruel, malvado y perverso aborda el personaje de Ted Bundy desde una óptica diferente. Bundy es uno de los asesinos en serie más infames de la historia de los Estados Unidos de América. Sobre sus asesinatos se han realizado múltiples trabajos para cine y televisión. Entre ellos otra producción de Netflix “Conversaciones con un asesino: Las Cintas de Ted Bundy”.

Un extraño atractivo se imponía sobre la figura de un hombre que había cometido los crímenes más horrendos que mente humana pueda imaginar.

El Príncipe Fantasma

Elizabeth Kendall fue la compañera sentimental de Ted Bundy desde 1969 hasta aproximadamente 1974. En su libro “The Phantom Prince: My Life With Ted Bundy” Kendall expone lo que fue vivir con quien luego fuera condenado por el asesinato de tres mujeres en la Florida y de manera posterior confesara haber asesinado a más de 30 mujeres. El libro fue publicado en 1981 cuando Bundy aún esperaba para ser ejecutado tras su condena a la silla eléctrica pero no recibió tanta notoriedad como la que tiene ahora luego de haber servido de base para el guion de Extremadamente cruel, malvado y perverso.

Michael Werwie colabora con Kendall y ambos logran una historia que se muestra muy atinada en la pantalla. Los asesinatos y toda la perversidad están presente pero la historia de este filme se nos cuenta desde el punto de vista de Elizabeth “Liz” (Lily Collins). En un largo flashback repasamos a esa Liz conviviendo con Ted Bundy (Zac Efron) y nos entramos en una parte poco conocida de la vida del asesino en serie.

Ted y Lily

Ted bundy

Un Galán Monstruoso

Lo que nos entrega Zac Efron es una actuación realmente efectiva y nos sorprende. El joven actor tiene el atractivo físico que le demanda el personaje y a la vez logra abrazar esa perversidad oculta que destila la mirada de ese Bundy. Los mejores momentos nos llegan en las secuencias en la sala del juzgado donde Efron se emplea a toda capacidad. Lily Collins también logra una interpretación muy acertada y podemos conectar con el sufrimiento y el agobio mental de su Liz Kendall.

El director Joe Berlinger quien ha desarrollado su carrera haciendo documentales y trabajos para la televisión plantea con Extremadamente cruel, malvado y perverso una película bastante sencilla, pero efcetiva. Berlinger no asume riesgos y apuesta por las formulas para resolver las situaciones y su puesta en escena es igualmente conservadora. La fuerza de los personajes hace que el filme se mantenga o flote y logre mantener la fuerza narrativa de principio a fin.

7/10